¿Por qué en Silicon Valley quieren mantener a los niños alejados de las pantallas?
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Últimamente no se habla de otra cosa. Las tecnologías y lo perjudiciales que pueden ser para los niños. Además, que los gurús de Silicon Valley, aquellos que viven por y para la tecnología, no dejen a sus hijos usarla, han hecho saltar las alarmas.
Imagen de Visit California[/caption]
Ellos son los que han diseñado complejos algoritmos que invitan a nuestro cerebro a que se enganche a determinados contenidos y ¿no dejan a sus hijos utilizarlas?
Hace años que se habla de las medidas que el propio Steve Jobs ponía a sus hijos. Pero ahora, son muchos los profesionales del sector preocupados por las consecuencias:
Hunter Walk, que fue supervisó los proyectos de Youtube y no tienen productos tecnológicos como el Ipad en casa.
Business Insider relata la historia de una familia de Silicon Valley. Ella trabaja en Apple y él tiene una empresa que crea contenido para Youtube. Sus hijos de 10 y 12 años tienen limitado el uso del móvil a 10 minutos a la semana, pero tienen acceso sin límites a una estantería llena de juegos de mesa y libros. El planteamiento está muy bien... tienen cientos de aventuras por descubrir en las estanterías ¡tenemos que animarlos a descubrir en sitios menos tecnológicos!
Ellos han vivido de primera mano el tiempo y esfuerzo que se dedica a hacer que la tecnología digital sea irresistible.
En 2017 se realizó una encuesta a 907 padres de la región por la Silicon Valley Community Foundation. Esta consulta mostraba la alta confianza en los beneficios de la tecnología pero la gran preocupación también por el impacto en el desarrollo psicológico y social de los niños.
Así que a pesar de que las tecnologías son buenas en muchos aspectos, la clave está en poner los límites.
Nos quedamos con la propuesta de ¡barra libre a nuestros niños con la estantería de los libros y los juegos de mesa! Y barra libre de Kietoparao siempre que estemos en la calle :)
Podéis ver AQUÍ los beneficios que tienen los juegos de mesa en los niños y en nosotros mismos.
Fuentes: