¡Me aburro! pues vamos a fomentar el juego libre
¡Me aburro!
-Oye, cuánto me alegro, suelo responder yo.
¿Os suena no? La imaginación no tiene límites y además entretiene horas. Así que un niño o niña aburrido es sinónimo de echar a volar su imaginación y creatividad.
Puede que la vida llena de prisas, actividades extraescolares y quehaceres no deje a los niños y niñas tiempo para estar consigo mismos e inventar. En la situación en la que hemos estado y vamos a estar mucho más tiempo en casa es perfecto para que se aburran y aprendan a jugar sol@s.
En casa los míos tienen Martina casi 8 y Leo 3 años. Es importante entender que cada edad y niño/niña es distinto. Y en función de las etapas en las que se encuentran es más fácil o no que jueguen horas tranquilos.
Con 8 años se entretienen mucho solos, hay que encontrar algo que les motive:
- Aprender a tocar un instrumento. El Ukelele por ejemplo. Ver tutoriales para aprender algo, es una forma educativa de utilizar las tecnologías. Tenéis aquí una cuenta donde aprender
- Pintar con acuarela.
- Dibujar.
- Escribir un diario o cartas a familiares y amigos.
- Juegos de mesa.
- Puzzles.
- Hacer pulseras de macramé. Podemos recordarlo nosotros para después enseñarles a ellos.
- Leer un libro. Aquí funcionan muy los de aventuras. La saga de Primos S.A, es un éxito.
Con esa edad tienen muchas opciones de entretenimiento.
El pequeño, Leo, ya es otra cosa. Es “dinamita pa´los pollos”, como diría mi madre. Seguro que más de uno que le conoce está asintiendo con la cabeza.
Le encanta explorar (su lugar preferido para el escondite es la bañera), hacer bajadas en bici y hacerse una guarida dentro del armario. Las primeras semanas fueron complicadas. Estaba sola con los dos todo el día, como miles de personas: intentando trabajar, comida, deberes de la mayor y el pequeño con ganas de explorar.
El tiempo de jugar a su aire al principio se limitaba a mirar cuentos, dar vuelta a su cuarto y poner piezas de madera por el suelo. Para mirar cuentos le preparaba un espacio de juego y lo rodeaba de libros para que él eligiera. Media hora era el tiempo máximo con el que se entretenía.
Ahora puedo decir que se está Kietoparao con un montón de cosas y se entretiene muchísimo solo. Así que… ¡se puede amig@s, se puede!
Después de este encierro ha desarrollado una capacidad de entretenerse solo que nos da paz en muchos sentidos.
Podemos hacer montones de cosas mientras juega. Si yo he podido ¡podéis también!
¿Cómo ha sido el proceso?
- CON TIEMPO: no ha sido de golpe, ha sido una evolución progresiva.
- EN EL LUGAR ADECUADO: Siempre jugaba en un sitio seguro donde puedan jugar libres.
- UN OJO PUESTO EN ÉL: Que puedas tener vigilado.
- LA FILOSOFÍA MENOS ES MÁS: no muchas cosas, si algo no funcionaba cambiábamos de juego.
- COSAS SENCILLAS: Con muchas posibilidad de crear: bloques, muñecos sencillos...
¿Cuáles creo que han sido las claves?
- Dejarle hacer solo, sin instrucciones. Las primeras veces serán sólo minutos (dependerá mucho de la edad). Con el tiempo pueden ser horas.
- Colocar elementos sencillos con los que puedan jugar o que sepas que les entretiene.
- Poner música relajante para transmitirle tranquilidad.
¿Qué tipo de juegos son buenos para inspirarlos?
- Construcción
- Disfraces
- Cuentos
- Pintar
- Juego simbólico
Leo hace un mix entre construcción con Legos y juego simbólico con los muñecos del propio juego o con unas tortugas Ninja rescatadas del baúl de los recuerdos. Figuritas para inventar sus historias y poner propulsores a barcos de Lego es lo que más le entretiene del mundo.
Queríamos contaros nuestra experiencia por si puede ayudar a más familias a reducir las horas de pantallas y animar a los niños a jugar siempre y seguir desarrollando su personalidad. Os recordamos que en el post anterior os hablábamos de 10 alternativas a las pantallas.
¡Buen fin de semana!
